Haiman El Troudi: El transporte de agua por una obra de ingeniería romana

El acueducto es sistema un sistema de irrigación que transporta el agua desde la naturaleza hasta la población para satisfacer sus necesidades vitales.

Esta es una solución empleada cuando la ciudad adquiere la categoría de auténtica, otras formas eran establecerse en las proximidades de un río o manantial, excavar o construir pozos dentro o fuera de la zona habitada.

Así, se planifica la conducción del agua de una población para garantizar su suministro. Para cubrir esta necesidad se promueven obras de gran envergadura, verdaderas obras de arte que retratan la peculiaridad de cada localidad.

Los ingenieros romanos, ingeniero (civil y militar) y arquitecto no estaban diferenciados, utilizaban para la construcción la piedra, la arcilla, la argamasa y la madera. En fin usaban una mezcla de cemento, arena, agua y grava o piedra machacada denominada hormigón.

Estos artífices originaron técnicas que se pudieron generalizar por todas las ciudades del Mediterráneo, obras concretadas por la unidad política del Imperio y el buen sistema económico que creó las condiciones para el desarrollo urbano para mejorar calidad de vida.

El recorrido del agua por canales se construía por las laderas de los montes, en línea pendiente con cajas o arcas de agua, depósitos que servían para regular el caudal y decantar los sólidos, a determinados intervalos de la construcción.

Los acueductos romanos continuaron en uso durante la Edad Media y en tiempos modernos, gracias a restauraciones. En fin, la técnica aplicada en los acueductos romanos se siguió usando sin modificaciones importantes hasta el siglo XIX.

En el siglo XX, la innovación de cementos, el armado del hormigón con acero y los nuevos materiales, además de técnicas de la construcción de conductos permitieron construir potentes estaciones de bombeo para la conducción del agua que simplificaron su adaptación al terreno.

Haiman El Troudi nos menciona un ejemplo de acueductos como construcción útil para el transporte de agua y verdadera obra de arte, es el acueducto de Segovia en España.

Este acueducto es una verdadera obra de arte y de ingeniería romana construida en el siglo II d. C. Su parte visible y más famosa es la arquería que cruza la plaza del Azoguejo en la ciudad.

Construcción que posee una leyenda conocida por todos los segovianos y que serviría para explicar el hueco reservado para poner la Virgen de la Fuencisla en lo alto dicha arquería.