Haiman El Troudi: La ingeniería en la obra de Gaudí

La Sagrada Familia de Antoni Gaudí, entre otras seis obras fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Antoni Gaudí se destacó en geometría y aritmética, recibió una educación tradicional, religiosa y humanística, criado entre los oficios del taller de su padre. En Barcelona, estudió arquitectura, carpintería, cristalería, cerrajería, dibujo y matemática. Gaudí recibió muchos encargos pero a la obra que se dedico hasta su muerte, 10 de junio de 1926 en Barcelona, fue al proyecto de la Sagrada Familia que se prevé será concluida en 2026, justo un siglo después de su muerte.

La Sagrada Familia es una construcción en la que el autor reúne creencias cristianas, el mensaje evangélico, la naturaleza, la geometría, la luz y el color.
Dieciocho torres colocadas jerárquicamente, portales de las fachadas que retratan la vida de Cristo, un templo concebido como la estructura de un bosque, con un conjunto de columnas arbóreas.

Columnas pensadas desde sus concomimientos de ingeniería, con ramas que sustentan una estructura de bóvedas de hiperboloides. Igualmente, los tragaluces o claraboyas fueron concebidos a partir de hiperboloides para liberar de peso a los techos y aportar iluminación.


Su estudio de la naturaleza se tradujo en el empleo de formas geométricas regladas como el paraboloide hiperbólico, el hiperboloide, el helicoide y el conoide, que reflejan las formas que Gaudí encuentra en la naturaleza.

Haiman El Troudi comenta y afirma lo que una vez dijo el propio Gaudí,: "El arquitecto del futuro se basará en la imitación de la naturaleza, porque es la forma más racional, duradera y económica de todos los métodos".

Emplea la curva catenaria, curva generada por una cadena suspendida de sus dos extremos y sometida a un campo gravitatorio uniforme, idea generada igualmente por sus conocimientos de geometría por la lectura de tratados sobre ingeniería, que se usaba en la construcción de puentes suspendidos.

Estas formas de construcción sencilla se asociaban a materiales baratos combinados con el ladrillo con argamasa, en capas superpuestas, como en la tradicional bóveda catalana tabicada.

Aún, Gaudí sugirió una estructura de hierro en forma de gran toldo suspendido, solución original bastante adelantada a su época, idea que impresionó a los ingenieros encargados de la obra.